Su nombre se debe a que Cristóbal Colón llegó un domingo y a diferencia de las otras islas de West Indies es la única que aún tiene cerca de 2.000 descendientes indígenas originarios llamados Kalinago. Un punto muy llamativo que gracias a la mezcla de etnias en Dominica se habla inglés, inglés criollo, patua (patois) y un poco de francés. Así que conversando con la gente puedes encontrarte con muchas adaptaciones de idiomas lo que se vuelve a veces confuso pero fascinante y único. Esta isla natural al igual que Martinica la rodea actividad volcánica por un estratovolcán llamado Morne Watt, y gracias a este fenómeno, sumado a que se encuentra en una de las localidades donde más llueve en el planeta, se forman cascadas y piscinas naturales. Además, al tener distintos climas en la isla lo que siembres crece sin tapujos, lo puedes apreciar caminando topándote con árboles de plátano, maracuyá o granada. Su balanza comercial siempre ha estado vulnerable a factores externos como los desastres naturales y los precios de importación de productos, sin embargo, el 2019 su economía creció a pasos agigantados exportando 8 veces lo habitual sobreponiéndose al Huracán María del 2017.
Decidí quedarme en Roseau, su capital, puesto que la isla tiene varios resorts y sus visitantes generalmente la recorren por el día en cruceros, pero como quería saber más me quedé 2 semanas. Comenzando la aventura llegue mareada casi vomitando en ferry desde Martinica (aun no logro acostumbrarme) y me dirigí a la tienda Flow que quedaba a dos cuadras del terminal para comprar internet y contactar a la anfitriona del Airbnb (plataforma digital de alojamientos). Luego de una espera de 1 horita finalmente pude hablar con Victoria quien me fue a buscar en una camioneta hasta el alojamiento. Luego de instalarme y sentir la humedad de 85% debo admitir que pasaba a segundo plano con el departamento de 2 piezas que era un lujo para lo que estaba acostumbrada. Digo esto porque en Santiago de Chile nos hemos mal acostumbrado a vivir en espacios diminutos a precios altísimos, y este tipo de experiencia nos despierta que hay muchos lugares en nuestro continente mejores y a menor precio.
La ciudad es bonita y muy verde, sus edificaciones son relativamente nuevas ya que la presencia de huracanes ha destruido mucho patrimonio en este lugar, sin embargo, tiene algo que me encantó desde el día 1, y es que todo era caminable y como buen peatón eso es fundamental. El casco histórico es pequeño pero preciso, cuenta lo necesario y listo. Su museo es sencillo, sin lujos, pero honesto.
Les cuento esto porque refleja un poco la personalidad de los dominicos (no confundir con dominicanos), que son amigables, abiertos, sin trabas y relajados. Su trato a diferencia de otros países caribeños, es más natural, abrazable y más sensibles. No sé si será por el clima y su naturaleza, pero son increíblemente tiernos.
Sin ir más lejos un día fui a un bar donde tenían música en un computador con una playlist desatendida y me aventuré como dj y tomé las riendas de la fiesta transformándose en un éxito, todo muy gracioso, bailado e improvisado.
Hay algo que dejó una huella en mí y fue el acercamiento a la etnia Kalinago, ya que me lleve una increíble sorpresa. Esta etnia como les contaba son los únicos en la región que conservan su cultura, muy parecido a los Gunas en Panamá, pero aquí en West Indies. El asombro vino cuando entré a su territorio (a 2 horas de Roseau) y noté el gran parecido físico que teníamos, ¡una locura! esculturas idénticas a mi abuelo materno y las personas parecían mis primos… ¿alguien me puede explicar esto? ¿en qué minuto pasé de ser una chilena a una Kalinago? y como dicen por ahí «La vida es como una caja de bombones… nunca sabes lo que te puede tocar». Y bueno no era casualidad, ya que estos indígenas llegaron desde Sudamérica y se fueron expandiendo por todo el continente, lo que justifica el gran parecido que tenemos. Una coincidencia enriquecedora que sella como una anécdota accidental.
¿Alguien me puede explicar esto? en que minuto pasé de ser una chilena a una Kalinago?
Peatón por el mundo
En Dominica me sentí muy a gusto, me llené de información y sentí el caribe en mis venas. Aquí es donde más compartí con ciudadanos afrodescendientes y me encantó, me sentí libre por derribar todo lo malo que alguna vez la sociedad me mal enseño, reeducándome por completo. Pienso, respiro, transpiro y me observo… ¿será que el conocimiento te cambia por completo? ¿será que mientras más conozco, más ignorante soy? ¿será que despertar lo inmenso y diverso que es el planeta te replantea? Todas las respuestas llevan a un sí rotundo. Y bueno un día nos encontraremos en otro carnaval y quizás en qué nivel de desarrollo estará este país, solo le deseo lo mejor y que nunca deje de ser la Isla Natural del Caribe.
Canción que me acompañó: https://youtu.be/oG36-tD41Lw (Fernando Cabrera- El tiempo está después)
Fotos de Scotts Head: https://www.instagram.com/p/Ch8jrSSj7W6/
Fotos de Morne Trois Pitons National Park: https://www.instagram.com/p/CiGipnTphiV/
Fotos de Roseau: https://www.instagram.com/p/CiaZ6-Zutxh/
Fotos de Territorio Kalinago: https://www.instagram.com/p/CiXvNLZuNtE/
